La biografía de la fotógrafa y académica, Isabel Muñoz Vilallonga, puede concretarse en los siguientes términos:
Isabel Muñoz Vilallonga, fotógrafa y académica, conocida como Isabel Muñoz. Nació en Barcelona en 1951. Reside en Madrid.
Es una de las principales fotógrafas del panorama español destacando algunos de sus galardones como el Premio Nacional de Fotografía en 2016. Su imagen, nacida de las enseñanzas de Ramón Mourelle, entre otros, nos traslada a un entorno en la mayor parte de las ocasiones en blanco y negro bajo con una técnica de revelado única. La obra de esta fotógrafa catalana han podido verse en las galerías más importantes de muchos países, formando parte de diversas colecciones permanentes.
Familia. Nació en el seno de una familia acomodada que residía en Barcelona. Su padre era abogado y empresario catalán y su madre valenciana . Estuvo casada con el ingeniero industrial Jesús Castelo, tuvieron dos hijos mellizos Julio y Manuel. Su hijo Julio, falleció de accidente cuando tenía sólo 17 años. En 1996 el matrimonio se divorció.
Formación. En 1979 decidió hacer de la fotografía su profesión matriculándose en la escuela Photocentro de Madrid. Sus fotógrafos de referencia fueron Ramón Mourelle y a Eduardo Momeñe.
Para proseguir con su proceso de aprendizaje, en 1982 se marchó a Nueva York. Su obsesión era encontrar un soporte idóneo para reproducir la piel, por lo que continuó en Maine sus estudios con Craig Stevens, con Robert Steinberg y con Neil Silkirk. Regresó después a Nueva York para estudiar el gran formato en el International Center of Photography (ICP).
Inicios profesionales. Empezó a recibir encargos, para prensa y publicidad. Y también para el cine, de la mano de Tote Trenas, quien la introdujo en el mundo de la fotografía para cine. En esa época realizó la fotofija de películas como “Sal gorda”y “Penumbra”.
Viajera por el mundo. Entre 1990 a 2007 Isabel viajó por muchos países para estudiar y reflejar de primera mano los temas que le atraen, para retratar la belleza o ser altavoz de denuncia. Entre otras, en el Sureste asiático desarrolló series sobre el tráfico de niños; en Etiopía (2005) se centró en las tribus que decoran sus cuerpos como forma de expresión; en El Salvador (2006) captó imágenes de las tribus urbanas y produce trabajos sobre violencia, y trabajó en el proyecto Nuestro Pequeño Mundo, fotografiando niños en la conmemoración del 20 aniversario de la Convención de los derechos del niño. Viajó a Irán, Siria, Turquía e Irak exponiendo “El amor y el éxtasis” como parte de PhotoEspaña 2010. Posteriormente, en México, expuso sobre el drama de la inmigración (2014). En 2015, decidió buscar en África los vínculos hacia el origen de los humanos, investigando a los grandes primates.
Accidente. Durante un viaje a Tailandia, mientras corría tras una procesión para hacer fotos, sufrió un accidente: una caída que le provocó la rotura de una vértebra. Tuvo que pasar por la mesa de operaciones y un largo proceso de recuperación, largo y duro. La rehabilitación duró hasta noviembre de 2016 y le hizo darse cuenta de lo efímera que es la vida. Ha seguido a partir de su recuperación su carrera profesional con nuevas exposiciones en las que el cuerpo, la diversidad cultural y el medio ambiente son temas predominantes.
Estilo. La mayor parte de sus fotografías buscan combinar el compromiso social con la búsqueda de la belleza, ahondando en temas como el cuerpo, el rito o la diversidad cultural. Sus fotografías, casi siempre en blanco y negro, son un estudio humano mostrando partes del cuerpo, imágenes de guerreros, toreros o bailarinas, usando un proceso minucioso y artesanal de revelado: la platinotipia.
Exposiciones. En 1986 regresó a Madrid y realizó su primera exposición,titulada “Toques”, en el Instituto Francés, los periódicos y revistas se hicieron eco de aquella exposición y en 1990 participó en el Mois de la Photographie [Mes de la Fotografía] de París, con lo que dio inicio a su proyección internacional. En su larga trayectoria ha expuesto en centenares de exposiciones en las principales ciudades de Europa, América y Asia.
Relevancia. En 2018, se organizó la exposición ‘La antropología de los sentimientos’ que la propia Isabel Muñoz considera la más importante desde la primera que hizo en París que descubrió su obra. Reunió 97 fotografías, seis audiovisuales, y varias esculturas de la artista, y refleja su recorrido destacando algunos aspectos menos conocidos. “Fue un recorrido temático en torno a la representación obsesiva y heterogénea del cuerpo humano, desde los mismos orígenes de la humanidad, la espiritualidad, la locura, los límites y extremos del cuerpo, la dimensión social de lo corporal y, finalmente, la sexualidad y el deseo”, según el texto que acompañaba a la exposición.
El fotógrafo José Manuel Navia, editor de El País Semanal, le encargó fotografiar a la compañía de Víctor Ullate. El texto lo escribió el periodista Goyo Rodríguez, gran amante de la danza clásica, que le enseñó a fotografiarla. A raíz de esto le salieron trabajos de encargo para fotografiar a su estilo a toreros, modelos, personalidades, bailaores de flamenco, atletas, temas sobre erotismo…
En 2020, Isabel Muñoz fotografió para el número de junio de la revista Vogue a los héroes anónimos de la pandemia del Coronavirus: sanitarios de hospitales madrileños, farmacéuticos, bomberos, periodistas, transportistas, cocineros…
Internet. Gestiona una web personal https://isabelmunoz.es/, donde está detallada toda su carrera profesional.
Publicaciones. En 1992 editó en París uno de sus libros más hermosos y originales en platino: ‘Parade Nuptiale’ y en Vigo, ‘Corpo a corpo’ y al año siguiente publicó los libros ‘Flamenco’ y ‘Tango’.
Academias. En 2023 ingresó como Académica de Número de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, con el discurso de ingreso: "Una antropología de los sentimientos". ella considera muy importante ese nombramiento para poder devolver a la fotografía algo de lo mucho que le ha dado”
Premios. Ha sido reconocida con algunos de los más prestigiosos premios nacionales e internacionales de su especialidad profesional destacando los siguientes:
Medalla de Oro en la Bienal de Alejandría, 1999
World Press Photo, 1999 (categoría Arte y Entretenimiento)
World Press Photo, 2004 (categoría Retratos)
Premio de Fotografía de la Comunidad de Madrid, 2008
Premio PHotoEspaña, 2009
Medalla del Mérito de Bellas Artes, 2009
Premio Bartolomé Ros por su trayectoria, 2009
Premio Nacional de Fotografía 2016, del Ministerio de Cultura de España. por «su trayectoria profesional, en la que combina el compromiso social con la búsqueda de la belleza, ahondando en temas como el cuerpo, el rito o la diversidad cultural».
Premio Optimista Comprometida con la Cultura, de la revista Anoche tuve un sueño, 2016
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